La diabetes es una enfermedad metabólica crónica cuya incidencia ha aumentado de manera notoria en los últimos años, posiblemente por factores vinculados al estilo de vida de la población, especialmente en los países con estilo de vida occidental.
El aumento en las cifras de pacientes diabéticos en la población mundial plantea otra problemática especial, que es la de las complicaciones crónicas que se presentan a medida que transcurren los años de enfermedad.
Las complicaciones crónicas de la diabetes abarcan 2 tipos de fenómenos: aquellos vinculados con el daño de las arterias de pequeño y de gran calibre, y el compromiso de las fibras nerviosas -tanto de las que se relacionan con la sensibilidad o la motricidad en los miembros superiores e inferiores, como las que inervan a los órganos internos, como la vejiga, el intestino y el aparato genital-.
Es precisamente el compromiso neurológico de la diabetes, también conocido como neuropatía, el que puede asociarse con un síntoma temido: el dolor crónico.
Dolor crónico en la diabetes mellitus
La existencia del dolor crónico en la población diabética resulta frecuente y especialmente indeseable en este tipo de pacientes.
En efecto, expertos de La Escuela de Medicina de la Universidad de Michigan, EE.UU., confirmaron los prejuicios de experimentar ese tipo de dolencia con relación al control de la diabetes.
Sus resultados surgen de un análisis llevado a cabo para establecer los efectos del dolor crónico en el autocuidado de la diabetes. El término de "autocuidado de la diabetes" se refiere a las pautas de tratamiento y de controles que debe seguir todo diabético para poder mantener a raya a su enfermedad. Este planteo terapéutico incluye la administración de la medicación en tiempo y forma, el cumplimiento de un plan alimentario y de ejercicios físicos, regular, y la realización de pruebas de control de glucemia, mediante punción digital.
Este estudio, practicado sobre 993 pacientes asistidos en el Hospital de Veteranos estadounidense , se basó en los datos recolectados en una encuesta, en la que se definió como dolor crónico a la presencia de dolor durante más de 6 meses, en el pasado año. Para extraer conclusiones válidas, se efectuó el ajuste de la información obtenida, a variables tales como condiciones socioeconómicas, pertenencia a grupos raciales diversos, y otros factores propios de la salud de los individuos que tomaron parte de la investigación.
Alrededor del 60% de los pacientes informaron acerca de la existencia de dolor crónico. Se trataba en general del subgrupo de enfermos de menor edad que los que no tenían dolor crónico, eran en su mayoría mujeres, presentaban un mayor índice de masa corporal (ecuación utilizada para valorar de manera directa la existencia de peso normal, elevado o reducido) y fueron mayoritariamente usuarios de insulina.
Lo más notorio del estudio fue la asociación significativa entre presencia de dolor crónico y mal control de la diabetes. En efecto, la existencia de dolor persistente traía una mayor dificultad para seguir las recomendaciones médicas respecto a los planes de alimentación y de actividad física. Los problemas para cuidar su diabetes fueron mayores entre aquellos con formas de dolor grave o muy grave, con relación a los que padecían cuadros dolorosos moderados o leves.
Teniendo en cuenta los resultados observados, la Dra. Sarah Krein, que lideró el grupo de estudio que publicó sus hallazgos en la prestigiosa revista médica Diabetes Care en enero de 2005, recomienda extremar las medidas terapéuticas para mejorar las complicaciones de la enfermedad en este grupo de pacientes.
Respecto al dolor crónico en diabéticos, constituye una problemática muy frecuente a cargo de los neurólogos, y de manera permanente se encuentran en desarrollo productos específicos para su resolución, además de las medidas comunes para el tratamiento propio de los cuadros dolorosos.
Editora Médica Digital, mayo de 2005
3 comentarios:
El dolor crónico afecta a muchas personas en todo el mundo, además este tipo de dolor afecta físicamente y psicologicamente al paciente. Cuando uno padece este tipo de dolor se deben buscar alternativas de tratamiento para controlarlo, en estos casos se deben buscar doctores especializados en chronic pain management para aliviarlos y para que el paciente recupere su calidad de vida.
Las personas que estamos expuestas a dolores crónicos estamos vulnerables a padecer de depresión, debido a que estos dolores afectan y alteran nuestra vida diaria. Esta situación se ve más complicada con la enfermedad de la diabetes, por eso es que tenemos que cuidarnos mucho. Para estos dolores crónicos buscamos ayuda en doctores que nos brindan un tratamiento adecuado para calmar nuestros dolores.
Grea tpost thanks for the read!
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