domingo, 5 de septiembre de 2010

100 Días, 100 Chefs, 100 Recetas, 2010: Día 54 Cesar Alejandro Asplanatti

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Comencé a querer la cocina desde muy pequeño ya que en punta de pie apenas alcanzaba la mesada para ver como cocinaba mi abuela, desde el amasado, las salsas, los mariscos, espectacular!! Y mientras lo recuerdo tengo en mente los aromas y el no toques eso…

Es como cualquier profesión al que uno le llama la atención y comienza a investigar y sentirse cada vez más atraído a medida que pasa el tiempo.

Mi primera interacción con el fuego fue a los diez años. Comencé a cocinar solo por diversión y realizando mezclas increíbles, algunas muy deliciosas y otras que para que les cuento. Pero así uno aprende, sale de lo formal y lo que me encanta es abrir la nevera, ver lo que hay ahí y recién ahí improvisar. Recuerdo cuando iba a restaurantes con mis padres, me gustaba mezclar cosas por ejemplo la sal con el aceite y el vinagre u otras cosas.

Pasado el tiempo vi que me gustaba mucho la química y la medicina. Me incline por esta última y a mitad de carrera me dedique a la química que realmente me gustaba, pero fue hacia la química clínica y es ahí donde me encuentro con las distintas patologías y en este caso conocer de cerca al paciente diabético. En aquella época no existían los avances de hoy. Los pacientes venían periódicamente a realizarse una prueba de glucosa y realmente era muy traumático a veces, personas que eran muy amables se los veía de muy mal humor, irritables etc.

Pero todo eso sabemos que es producto de dicha patología, el conversar con ellos mas lo que uno mamo desde los libros pude ver realmente cuan importante era la comida y es aquí el tema por que no solo saber que productos podían comer si no la cantidad.
A todo esto yo seguí cocinando pero un día lo quise hacer en forma ya profesional y me decidí ir al Instituto Argentino de Gastronomía (IAG) en el cual curse y vi, que todo lo que se hacia es como que ya lo sabia pero no con los términos culinarios y me apasiono mas aun. De ahí fui a trabajar a un restaurante (cual), tuve mi propia heladería, pero siempre trabajando en el hospital por la mañana y a la noche era mi cable a tierra la COCINA hermoso.

Fue entonces todo muy veloz, conociendo grandes cocineros aquí en América como Daniel Tolosa, Osvaldo Gros (en argentina) En Europa: Lalo Bosch, Rafael Zafra, Dany García, Alessio Corda, hasta que llegué sin darme cuenta y es un sueño aun, a la cocina del más grande: la de ferra Adrià en el hotel del bulli. La experiencia en la hacienda fue excelente donde se mezcla la cocina andaluz en la picina del hotel y la de Ferrán en la alquería, mucho trabajo y sudor pero se ve el resultado y es maravilloso, como se trata la materia prima, las hierbas frescas de la huerta el profesionalismo que se pone, todo eso hace que el producto final no falle.

Todo eso me abrió mucho más la cabeza.

Pero lo importante es poder trabajar en una cocina amplia que sea para todos y aquí no solo es la persona diabética también el celiaco es importante tenerlos en cuenta verlos degustar y sentirse feliz al culminar el plato.

Actualmente trabajo en mi propio emprendimiento realizando cenas privadas y eso pone en actor principal al comensal, es un placer.

Les comparto una receta muy sencilla pero sabrosa

Ensalada del Mar y de la Huerta

Ingredientes para 4 personas


150 gramos de bacalao,
6 tomates, 4 huevos duros,
2 pimientos rojos grandes,
una cebolla grande,
aceite de oliva,
vinagre.
50 gramos de alcaparras,
perejil.

Preparación

Ase los pimientos y pélelos, corte la cebolla en aritos y pique el tomate pelado. Trocee el bacalao en taquitos. Mezcle todo en un bol y añada aceite y vinagre. Deje macerar 15 minutos. Agregue los huevos cocidos.

Sirva esta ensalada con tomates fileteados alrededor del plato y adorne con un poco de perejil.

NOTA: Esta receta no contiene azúcar, pero sí otros hidratos que cabe tener en cuenta. Solo tu Médico o Nutriólogo deben indicarte las porciones de alimentos a ingerir.

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